12 internautas hablan de juventud.

El experimento ha terminado y estos son los resultados. Han sido doce las visitas del blog que han dejado su parecer sobre diversos temas relacionados con “juventud”. Por si hay algún despistado le diré que en el post anterior, “El post incompleto sobre juventud”, pedía ideas y propuestas sobre el tema y de ahí trataría de dar algo de forma a un documento. Y, por supuesto, yo no aportaría nada, sólo dar forma. Y ha salido esto.

“Vivimos en una sociedad donde se criminaliza a la población joven continuamente si  no siguen dentro de un sistema cuadriculado y homogéneo”.

Organización y funcionamiento de departamentos de juventud.

-     Aclarar su papel, contenidos y objetivos. Debe decidirse si es un órgano para hacer actividades o dedicado a la gestión integral de la situación juvenil.

-   Que no realicen actuación alguna directamente con jóvenes si no han sido propuestas por ellos mismos. Dejemos de sacarles las castañas del fuego, que se lo  curren.

-   Que se cambie el modelo de elección del máximo responsable de juventud (Concejal, Director General) y no se permita que nadie, sin un conocimiento básico, acceda a este puesto.

-       Que la planificación y el trabajo con los centros educativos y socioculturales se convierta en algo estable y colaborativo en donde el objetivo fundamental sea proporcionar a los jóvenes herramientas que despierten su pensamiento crítico a la vez que descubran sus capacidades.

-      Que la figura del educador de calle sea la pieza fundamental para la relación con los jóvenes desde estos departamentos y de las propias organizaciones. Debe acompañarlos durante un tiempo pero su obligación es desaparecer poco a poco.

 Formación, empleo e inclusión.

-       Avanzar la edad laboral.
    

-       Fomentar programas de ocupación juvenil basados en la adquisición de trabajo y formación profesional.

-      Líneas específicas de trabajo con personas en situación de riesgo psicosocial, basadas en la ocupación y acompañamiento educativo.

-      Un plan nacional que, sobre la mayoría de edad de cada joven, le permita la posibilidad de trasladarse a otra ciudad española o europea durante un tiempo, antes de decidirse por su futuro laboral. Este plan contribuiría más que cualquier otra cosa a la formación como persona de los ciudadanos jóvenes.
    
   Una Plan para dinamizar la vida juvenil en las zonas rurales a todos los niveles.

-      Que los jóvenes que no terminaron la educación secundaria puedan volver para acabar sus estudios.

-     Que las actividades formativas que organizan los departamentos de juventud fueran a solicitud de grupos de jóvenes y no a demanda de empresas de formación.

-      Integración e inclusión de personas con diversidad funcional.

Participación e itinerarios personales.

-     Abrir un proceso de participación en todos los ámbitos en dónde se den a conocer experiencias positivas en materia de juventud y que cualquiera pudiera exponer sus ideas y proyectos realizados. No pensemos ningún sistema participativo  dónde no estén ellos desde su origen.

-   Trabajar con los jóvenes en grupo y sobre temas concretos basados en la participación, la reflexión y el posicionamiento en cada tema les ayude a desarrollar su pensamiento en cuanto a sus valores y otras cuestiones.

-  Además, es necesario el trabajo individual con ellos, reforzando sus potencialidades lejos de programas estandarizados y férreos.

-     El acompañamiento incondicional del educador es clave pero siempre deberá tener en cuenta que quien decide es el protagonista: el joven. Nos guste o no.

Pues sí, a todo esto ha dado de sí el experimento. Doce colegas internautas lo han hecho, así como el que no quiere la cosa. A estas conclusiones se llegan en algunas jornadas después de dos días de grupos de trabajo y aquí lo hemos hecho en un plisplas. Al final va a ser verdad que a poco que nos esforcemos esto del internet va a ser una herramienta más que poderosa.

Me pregunto qué seríamos capaces de hacer si a través de un crowdfunding lográramos financiar un encuentro en dónde nos reuniéramos los profesionales que trabajamos con jóvenes para aclararnos nosotros primeros y luego componer una propuesta de funcionamiento basada en las personas, el conocimiento y la razón.

Mil gracias a los doce valientes, auténticos autores de este post.

Pedro M. Fernández, Daniel  García (@DaneGarciaSCQ), Jordi Bernabéu (@JordiBernabeu), José Francisco, Miguel Pérez (@mignesias), anónimo de Asturias, Pablo García (@elcasopablo), Francisco M. Pérez (@FranMPM),  Andrés Abad, Carmen Carrión (@caordas), Alex y Javier C.

Por cierto, a petición de Pablo García, sería bueno que hiciéramos muchas más sesiones de risoterapia en nuestros grupos. Todo iría mejor después. Yo también lo creo.