Pues
sí, quién me iba a decir que dos años y medio después de poner en marcha este blog iba a tener cien
mil entradas. No sé si son muchas o no, a mí me parecen suficientes y he de
agradecer todas y cada una de ellas.
Es
tiempo de hacer un repaso de planteamientos, de no morir haciendo lo mismo y de
analizar lo bueno y lo no tan bueno. Si tienes un ratito y quieres, me puedes
acompañar.